Las dos caras del expresidente JOH
Ya lo había anticipado su abogado defensor Raymond Colón durante el segundo día del juicio contra el expresidente hondureño Juan Orlando Hernández, JOH, que estaba 99.99% seguro que su defendido testificaría, y así ocurrió 13 días después. Un testimonio que se extendió de un día hacia otro.
El juez Kevin Castel, le advirtió que tenía derecho a testificar, pero que no estaba obligado a hacerlo, que si no lo hacía tampoco sería percibido como una declaración de culpabilidad por parte del jurado, “lo entiendo” contestó JOH.
Durante el día 11 del juicio, JOH se mostró tranquilo, eso podría estar acompañado a la sensación de no estar solo, como había ocurrido por cerca de dos años, ocupando una celda fría del Centro de Detención Metropolitano, en Brooklyn, Nueva York.
Esta vez, los únicos tres hombres leales a JOH se ubican en primera fila. Son sus tres Generales, los únicos que testificaron a su favor. Además, una mujer a quien se le identificó como parte de su familia, por lo menos eso le dijo la abogada Sabrina Shrof al oficial de la Corte.
Es la segunda vez que JOH tuvo contacto físico con otras personas que no fueran sus abogados defensores o sus escoltas, quienes le quitan y ponen las esposas. Anteriormente su guía espiritual, un Pastor evangélico influyente de Nueva York, cuya familia es de cuna nacionalista en Honduras, ya le había estrechado la mano.
La mujer pidió al oficial de la corte acercarse al acusado, este oficial de apellido “Rizotti” lo consultó con los escoltas, dos hombres altos y corpulentos vestidos de traje formal, quienes la autorizaron; ella se acercó, intentó mostrarle un mensaje en papel y buscó darle un abrazo que fue impedido por los escoltas, permitiendo solamente un breve saludo de manos, suficiente para cambiar los ánimos de quien en breve se sentaría en el banquillo para ser interrogado.
La sala 26B estaba abarrotada, el juez Kevin Castel hizo pasar al acusado y prestó juramento para no mentir en el interrogatorio. Su defensor Raymond Colón lo esperaba con más de un centenar de preguntas.
JOH se mostró lúcido, atento a contestar, con gran claridad mental, incluso se apresuraba a responde; se sentía como “pez en el agua” o como político en campaña, hablando de su vida, sus logros, sus decisiones como presidente y las estrechas relaciones que tuvo con altos funcionarios de Estados Unidos.
Recordaba cada detalle, cada reunión, cada ley aprobada durante su gobierno, cada nueva policía creada. Lo único que interrumpía la fluidez con la que hablaba eran las objeciones del fiscal Kyle Adam Wirshba. En el aire resonaban las palabras de su abogado quien afirmó en su momento que el propio JOH “era su propia salvación”.
Así la defensa fortalecía su narrativa sobre el combate a las drogas que impulsó el acusado, mientras era Presidente del Congreso y luego Presidente del país en dos ocasiones. Hablaron del escudo marítimo, de Obama, de Biden, y muchas reuniones en las que participó. También dijo que no tenía una relación cercana con Tony Hernández, mucho menos con Fabio Lobo, a quién calificó de una persona a la que no le gustaba trabajar y prefería el dinero fácil.
El expresidente dijo que, Honduras era un ejemplo de países en la lucha contra el lavado de activos, gracias a lo que su gobierno hizo. Recordaba con claridad los nombres de los narcotraficantes extraditados de Honduras: Los Valle, Los Cachiros, Don H, Los Ardón, Los Montes, entre muchos otros estaban en su lista.
También tuvo la oportunidad de contar qué pasó con el exalcalde de Yoro, Arnaldo Urbina y Amílcar Alexander Ardón exalcalde de El Paraíso, Copán. A Urbina lo capturaron por desobedecer al Presidente y luego fue extraditado. Además, aseguró que sí estuvo en la fiesta de Moncho Lobo, hermano de Pepe Lobo, aunque no estuvo mucho tiempo y no se tomó fotografías. A las 3:19 de la tarde la defensa a cargo de Colón terminaría el interrogatorio.
La otra cara
El contrainterrogatorio de la fiscalía a cargo de Kyle Wirshba, mostraría un personaje totalmente distinto. Aquella capacidad de contestar y de mostrarse seguro, cambió a una actitud arrogante y con poca retención de la información.
La Fiscalía iniciaba así:
Fiscal ¿Estuviste aquí cuando escuchaste a Fabio Lobo decir que su padre aceptó sobornos mientras era presidente?
JOH: Lo escuché pero no sé si es verdad.
Fiscal: ¿Has oído hablar de los mayores traficantes de Honduras?
JOH: Sí
Fiscal: Hugo Ardón ciertamente era miembro de su partido
JOH: Sí, cuando comencé mi administración, él ya tenía su cargo.
Fiscal: Pero él tuvo un puesto en tu campaña de 2013 en Copán, ¿no?
JOH: No recuerdo eso.
Fsical: Después de que Alex Ardón llegó a su casa, ¿se postuló para alcalde en 2013?
JOH: No lo recuerdo.
Fiscal: ¿Usted declaró que fue a casa de Fuad Jarufe a verificar el precio del arroz?
JOH: Los precios de los alimentos son muy sensibles en Honduras.
Fiscal: ¿Pero fuiste a recaudar dinero?
JOH: Él enviaría el dinero al banco, a nuestra cuenta.
Fiscal: ¿Fuiste a hablar de dinero?
JOH: No estoy seguro.
Fiscal: ¿No recuerdas haber hablado nunca con él, sobre dinero?
JOH: Mi equipo de campaña hizo eso.
Fiscal: Lo único que discutiste fue el precio del arroz, ¿no?
¡Objeción!
Juez Castel: Anulado.
JOH: También hablé con él sobre la violencia.
Fiscal: ¿Conoces a Geovanny Fuentes Ramírez?
JOH: No.
Fiscal: Mira esta foto, ¿te acuerdas?
JOH: No.
Fiscal ¿Has conocido a sus hijos?
JOH: He conocido a tantos niños.
Fiscal: Viste esto durante el juicio, ¿eres tú? (una foto)
JOH: Podría ser [risas]
Fiscal: ¿Cambió la Constitución de Honduras para mantenerse en el poder?
JOH: Yo no lo hice señor.
De esa forma, el ex Presidente de Honduras, participó como testigo en su propio juicio. Recordaba fotografías que se tomó junto a Donald Trump, John Kelly, Obama entre otros, pero no recordó las fotos que se tomó con los hijos de Geovanny Fuentes Ramírez, ni con Hugo Ardón, ni con Fabio Lobo, ni con Los Valle. Sobre Tony Hernández, dijo que pidió al fiscal General en ese entonces Oscar Chinchilla, que investigara a Tony.
El Fiscal le preguntó sobre las reuniones en Graneros Nacionales y si estas existieron, JOH lo confirmó, pero aseguró que fueron para hablar del precio del arroz, un tema sensitivo en la economía hondureña.
Luego el Fiscal le preguntó si el Cartel de Los Vallefinanciaron partidos políticos, JOH le respondió que los narcos no tienen partido político. ¿Pero financian candidatos? preguntó el Fiscal. Sí, a todos contestó JOH.
¿También lo financiaron a usted?
No, excepto yo señor, contestó JOH.
El expresidente Hernández, asegura que no capturó a los Ardón ni a Fabio, porque eran un objetivo de la DEA, a Los Cachiros, porque estaban colaborando desde el 2013 con Estados Unidos. Y en el caso de Tony, aseguró que no era tan cercano a él, pero que, aun así, le pidió al Fiscal General en ese entonces Oscar Chinchilla Chinchilla que lo investigara, debido a que había ya rumores sobre Tony.
Negó recibir sobornos y dar protección a narcotraficantes. Parar al menos tres extradiciones durante su gobierno, entre las que se encontraba la de Mario Cálix, Miguel Urbina Soto y El Tigre Bonilla.
Negó que Geovanny Fuentes Ramírez haya estado en Casa Presidencial en el año 2018 como lo indica la geolocalización, argumentando que la casa presidencial fue movida a la Secretaría de Relaciones Exteriores ese año.
A partir de ahí, las respuestas de la Fiscalía, serían respondidas con “no recuerdo”, “No señor”, “podría ser” y a contestar de manera arrogante al fiscal Jacob Gutwillig.
La Fiscalía cerraría con sus últimas interrogantes, sobre los sobornos que pagó Alex Ardón, Fabio Lobo, Fuentes Ramírez, Los Cachiros, Luis Pérez, Los Valle, a cambio de protección, JOH respondió que eran mentirosos profesionales y que tenían motivos para hacerlo. Entonces usted es el único que está diciendo la verdad preguntó la Fiscalía, “Yo no he recibido dinero señor”, dijo Hernández.
Ahora el primer expresidente hondureño, juzgado por delitos relacionados con el narcotráfico, espera un veredicto del jurado que definirá cuál será su residencia por el resto de muchos años.
